26.06.2024
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La Fundación Ochotumbao vuelve a darlo todo en un evento solidario este 2024. En esta ocasión, se trata de una iniciativa sin ánimo de lucro en la que un grupo de personas participará en una vuelta a nado a la isla de Formentera para nadar en contra la Fibrosis Quística (FQ). Este reto tendrá lugar del 28 al 30 de junio en la isla y, con esta iniciativa que promueve la Fundación creada por los actores Dani Rovira y Clara Lago, recaudará fondos a beneficio de Respiralia, que ayuda a las personas con Fibrosis Quística.
El equipo solidario creado para la prueba está formado por Dani Rovira, cofundador de Ochotumbao; Daniel Solano, gerente de Ochotumbao; Vanessa Romero, la actriz, modelo y escritora; Martín Giaccheta, embajador de Goya Sport y entrenador personal; y Juanlu González, actor.
La Fundación Respiralia ayuda a niñas, niños y jóvenes con fibrosis quística. Es considerada una enfermedad rara y su tratamiento tiene un coste muy elevado que requiere de una atención continuada por parte de los profesionales sanitarios, las familias y las personas que la tienen.
La Fibrosis Quística (FQ) es una enfermedad genética que afecta a todos aquellos órganos que producen secreciones, principalmente el respiratorio, el digestivo y el reproductor. Desde la fundación fomentan herramientas para facilitar su autonomía personal y les ayudan en la adquisición de valores y contribuyan a mejorar su calidad de vida. En definitiva, conseguir que la FQ sea una enfermedad con la que puedan convivir sin que afecte más de lo estrictamente necesario al desarrollo de la persona, tanto a nivel social como profesional.
Todos los participantes recaudarán fondos a través de distintas iniciativas deportivas, entre ellas, correrán a beneficio de esta causa. Una de las acciones más destacadas de estos días será el reto al que se enfrentará nuestro embajador Martín Giacchetta. Con su voluntad y preparación, dará una vuelta entera a la isla de Formentera nadando (75 kilómetros).
Martín Giaccheta es entrenador personal y colaborador habitual en los proyectos solidarios de Ochotumbao, especialmente en el ámbito de los retos deportivos solidarios. De hecho, en el pasado ya estuvimos juntos pedaleando a favor de la Fundación Mi Princesa Rett: para crear conciencia sobre una enfermedad rara y lograr la recaudación necesaria para la investigación.
Este artículo se ha actualizado conforme a la consecución del reto: ¡Martín lo ha conseguido! Nos ha concedido unos minutos para respondernos algunas preguntas que nos han surgido y que seguro que a ti también te generan interés. ¡Vamos a ello!
¿Cómo te preparaste para afrontar el reto? Y sabiendo lo que nos gusta la alimentación en Goya… ¿Qué dieta seguiste para superarlo?
Nadando mucho. No hay un manual de cómo entrenar una vuelta Formentera y, al no haberlo, no hay más secreto que entrenar nadando mucho cada semana. Mi sentido común como entrenador personal me incitó a nadar muchas semanas entre 25 y 40.000 metros, lo que se traduce en llegar a nadar 10 kilómetros algunos días y otros unos 6 o 7 kilómetros. Con esos metros en el cuerpo afronté dos travesías con mucha seguridad y me permitió conocer para saber que el reto estaba más en mi cabeza que en mi cuerpo.
¿Cuál fue el mayor desafío al que te enfrentaste mientras lo hacías?
Para mí la alimentación es esencial, porque el cuerpo es como un coche: si tenemos el mejor del mercado pero tiene un mal combustible, el resultado va a ser malo. Yo soy sincero y no creo que tengo el mejor coche, pero sí un gran producto como combustible. Ya saben que en mi familia Goya soy muy fanático del aceite, del agua de coco y de todos frijoles, que me encanta mezclarlos con arroz. A partir de ahí trataba de compensar más por la noche: no siempre se trata de meter algo muy proteico para ir más limpio, pero el resto del día me alimentaba con con productos de calidad que para mí son básicos básicos para conseguir este reto.
¿Pensaste en abandonar en algún momento? Y si es así, ¿qué te hizo continuar?
El mayor desafío que tuve, sin duda, fueron las medusas. Yo no le tengo miedo al mar, sé que es el que manda, y sé que se deben respetar las normas que imponga cada día, y así fue. Cuando hay olas no conviene enfrentarte a ellas, ni cuando hay corrientes en contra. Tuve que ir con máximo respeto al viento y, teniéndolo en cuenta, aparecieron esos “inesperados”. Sin darme cuenta me choqué con dos bancos de medusas que me picaron tres veces y en otra ocasión, me tocaron seis o siete más al menos. Generaron muchísimo dolor hasta el punto de que tuve que subirme a la barca de apoyo para ponerme cremas que calmaran el dolor. Grité y jadeé un poco porque el dolor fue muy intenso en diferentes partes del cuerpo. Llegué a pensar incluso a plantearme continuar pero en cuanto apareció la palabra ‘abandono’ pensé: ¿Que unas medusas van a condicionar mi sueño y mi felicidad? ¡Ni loco te lo permito! Me relajé y seguí nadando. Por suerte no me volvieron a picar, pero ese fue sin duda el gran obstáculo a superar en este reto.
¿Qué le dirías a una persona que estuviera pensando en enfrentarse a un reto similar?
A esa persona le diría que debe hacer los deberes a nivel físico primero y, una vez los tenga, que se arme con las herramientas necesarias para para afrontarlo. Hay que tener muy bien trabajada la cabeza y la mente para poder visualizarte consiguiendo la meta. No hay que dudarlo ni un minuto porque la cabeza es la que puede enviarnos por el camino contrario.
Además, recomendaría tener experiencia dilatada para afrontar un reto de tal magnitud, porque a veces veo que el fracaso existe cuando el objetivo que nos planteamos es irreal en un momento puntual de nuestras vidas. En definitiva: criterio y sentido común en la displina para afrontarlo.
Cuéntanos, ¿qué aprendizajes te llevas sobre la sensibilización, tratamiento y apoyos que necesitan los pacientes y familias que padecen de fibrosis quística?
Me he dado cuenta de que tanto los médicos especialistas, como nosotros los entrenadores, empezamos a encontrar un punto en común sobre la necesidad de hacer actividad física ante la enfermedad. Para mí puntualmente también la actividad física es el mayor escudo ante la adversidad que la vida les puso. La fibrosis quística necesita pacientes activos; el paciente sedentario tiene menos escudo ante las inclemencias, la pereza, el sobrepeso o la falta de musculatura.
Si nuestro pulmón nos pone una piedra más, recuerden que tenemos que saber que el mayor remedio es la actividad física por supuesto complementada con los fármacos indicados por los médicos que saben mucho más que yo de esto.
La Fundación Ochotumbao es una iniciativa sin ánimo de lucro que tiene como objetivo apoyar a aquellos proyectos dirigidos a mejorar la vida de las personas más desfavorecidas, la conservación del medio ambiente y la defensa de los animales.
La manera de llevarlo a cabo consiste en la recaudación de fondos a través de espectáculos, galas benéficas y retos deportivos (entre otras actividades) con el objetivo de dar visibilidad y ayudar a financiar las iniciativas que ponen en marcha otras asociaciones de carácter solidario y ONG.
A la campaña solidaria se ha sumado el Consejo Superior de Deporte, que se alía a la Fundación Ochotumbao para este y otros proyectos mediante su apoyo a través de la Fundación Deporte Joven.
Ochotumbao cuenta también con el apoyo de las marcas que se han sumado al reto apoyando la causa: Tenth, Tajín, Hawkers, Goya Europa, Fundación Abel Matutes, Clickché Comunicación, 226ers, Skateflash, Fundació Balearia, Suunto, Insotel Hotel Group, Verbigrafía, Nadal Retolació y el Consell Insular de Formentera.
Desde Goya Europa solo nos queda desear el máximo de los éxitos en este reto y en todos los que están por venir. Juntos, seguiremos apoyando para avanzar en el ámbito de la investigación médica.
Artículo actualizado a día 3 de julio de 2024.