Consejos para conseguir el tequeño perfecto

Los tequeños son una elaboración originaria de Venezuela: un país cuya gastronomía nos encanta en todos los sentidos. En Goya nos esforzamos por conseguir que los productos y sabores de Latinoamérica lleguen a todos los rincones del mundo. Y esta receta no iba a ser menos.

En nuestro catálogo hemos investigado para que nuestros clientes tengan la versión original de esta receta y una versión a lo grande. Vamos: lo mejor de lo mejor. En este artículo verás una serie de trucos para que los tequeños Goya te queden irresistibles y otros adicionales por si te aventuras a prepararlos desde cero en tu cocina. 

¿Ya lo tienes todo listo? ¡Vamos a ello!

El origen del tequeño 

Este original aperitivo venezolano tiene su origen en la ciudad de Los Teques (en el estado de Miranda, Venezuela). La primera versión de este plato se le atribuye a una mujer llamada Mary Paz Pondal y la primera vez que se escuchó hablar de él fue a mediados del siglo XX. 

Como cualquier buena receta, fue un día en el que Mary Paz empezó a realizar pruebas en su cocina y decidió envolver queso blanco en una masa de harina. Después de freírlo, descubrió que había conseguido un resultado dorado y crujiente que hizo las delicias de toda aquella persona que lo probase. Pronto corrió la voz por toda Venezuela y, más adelante, empezó a extenderse por el resto del mundo. Hoy en día, como ya sabemos, es uno de los estandartes de la gastronomía venezolana. 

Cómo conseguir el resultado perfecto con los tequeños Goya

En Goya, como anunciábamos al principio de este post, hemos investigado hasta obtener dos productos diferentes, pero relacionados. Aprende a preparar cada uno de ellos para conseguir el resultado de tequeño ideal. 

Tequeños deditos de queso

Esta es la versión más tradicional de la receta, y la tenemos en formato de 8 o 12 unidades. Son perfectos para acompañar con diferentes salsas e ideales para compartir entre varios comensales. Para conseguir el resultado ideal solo tienes que: 

• Calentar, en una sartén o freidora, aceite a 180ºC.
• Freírlos durante unos 3 minutos, hasta que veas que están dorados por toda su superficie. 
• ¡Consejo experto! No peques en los tiempos de cocción. Si esperas demasiado tiempo, el queso puede salirse y, al entrar en contacto con el aceite caliente, puede salpicar y provocar quemaduras.
• Truco Goya: no lo hagas al horno; por la composición del producto el resultado final no es el ideal.

Tequeñón

Esta versión acaba de salir del horno (literal y figuradamente) y es fruto de muchos meses de investigación. Este formato de tequeño es más grande y es ideal para compartir con otra persona, además de que combina a la perfección con las mismas salsas que los tequeños. Para conseguir el resultado perfecto solo tienes que: 

• Precalentar el horno a 180ºC o encender la freidora de aire.
• Deja que se hornee durante unos 25 minutos, o bien 8 minutos si se trata de una freidora de aire.
• ¡Consejo experto! No lo descongeles antes de cocinar. La composición está pensada para que pase directamente del congelador al calor del horno.
• Truco Goya: para el mejor resultado, no lo frías en aceite. Así te asegurarás de que se cocina a la perfección desde dentro hacia fuera evitando que el queso quede crudo.

¡Y voilà! Estos son los secretos mejor guardados para prepararlos. 

Cocina desde cero el tequeño perfecto

Si en cambio hoy te ha levantado la inspiración de la cama y lo que te apetece es meter las manos en la masa, es hora de seguir con una opción de receta de tequeño para que hagas paso a paso. 

Ingredientes:

Para la masa:

• 2 tazas de harina de trigo o de Masarepa.
• 1 cucharadita de sal.
• 2 cucharadas de mantequilla (o margarina) a temperatura ambiente.
• 1 huevo.
• 1/2 taza de agua tibia.

Para el relleno:

• 200g de queso latino.
• Aceite para freír.

Elaboración: 

¡Vamos a por la masa!

• Mezcla en un bol grande la harina y la sal. A continuación, agrega la mantequilla hasta que se integre y forme una textura arenosa.
• Incorpora el huevo y mezcla nuevamente hasta obtener una textura más homogénea.
• Agrega poco a poco el agua mientras mezclas y ve valorando el resultado. Lo ideal es conseguir una masa suave que no se te pegue a los dedos.
• Una vez la tenemos, cubrimos el bol con un paño húmedo y dejamos reposar una media hora. 

Ahora toca el relleno y el proceso de envolverlos: 

• Corta el queso en tiras de aproximadamente 1 cm de ancho y no más de 10 cm de largo para que el tequeño te quede de un tamaño estándar.
• Una vez tenemos la masa reposada, divídelo en pequeñas porciones y, con un rodillo, ve estirando cada una y creando una forma rectangular.
• Coloca una de las tiras de queso en un extremo de la masa y comienza a enrollar el rectángulo. Asegúrate de que el queso queda totalmente cubierto por la masa (si no lo consigues, añade pequeños trocitos y presiona con el dedo). 

Por último, ¡el cocinado! 

• En una sartén, calienta aceite a unos 180º. Asegúrate de que esté bien caliente (sin llegar a quemarse, claro).
• Añade tus tequeños y frielos hasta conseguir un resultado dorado y crujiente. 

Si te apetece experimentar como lo hizo en su día su creadora, puedes probar a añadir diferentes tipos de queso. ¡Así conseguirás diferentes sabores al original! 

El verdadero secreto para el tequeño perfecto es la práctica y la paciencia. Mientras tanto, invita a tus amigos y familiares a probarlo. ¡Estarán encantados! 

Nos leemos muy pronto en el próximo artículo, ¡que aproveche!